Son las 06:24 de la mañana, estoy delante del ordenador: café con leche en mano, hoja en blanco; inmóvil e inmersa en esa pausa previa a escribir que lo inunda todo. Han pasado ya dos meses y medio desde mi operación de apendicitis con peritonitis generalizada, un punto y aparte tanto en mi vida personal como profesional por la gravedad de la cirugía.
Este no ha sido el verano de mi vida, para qué mentir, pero sí el verano de aceptar y sanar para vivir más ligero, más de verdad. Todo pasa por alguna razón, mi apéndice me regaló una nueva oportunidad para levantar la mirada, prestar atención y escuchar con el oído bien pegado a la vida, la melodía.
Entre lo aprendido, constatar que mi positivismo es infranqueable; mis ganas (de todo) -mi pulmón y la mejor medicina-, y que, si las cicatrices enseñan, la empatía y las caricias, también.
Vuelta a lo que aquí nos concierne, veo un horizonte lleno de posibilidades. Septiembre siempre ha sido mi mes favorito, el inicio de retos personales y profesionales y, para mí, el mes de la moda por excelencia. Devorar las revistas (tendencia, cultura, estrenos, arte) cuenta como clásico, porque los nuevos comienzos siempre son excitantes e ilusionantes.
La nueva temporada se rinde al estilo après-ski, la estética gótica, el mood preppy, el color rosa, el print animal, la inspiración old school, el punto Technicolor como “el tejido”, las faldas micro como “la prenda”, el sastre a color como “el look”, los hot pants como “el must” de la temporada, el abrigo oversize como «el toque final”, las capuchas como “el accesorio”, las gafas de pantalla XL como “el detalle”, la colaboración Gucci x Adidas como “el hype” de la temporada, y un largo etcétera que iremos desgranando con todo lo que nos atrae, mueve e identifica dentro de la industria de la moda.
Mi apuesta: america over de la nueva colección “Into the night” de Zara, creada en colaboración con Kate Moss. Una prenda de género neutro, de línea entre el armario masculino y el femenino, que suma positivos en esta tendencia tan aplaudida para dar un ‘twist trend’ a las normas de estilo. La he combinado con vestido largo con escote XXL fruncido con cordón y falda acampanada de cáñamo de la firma FARA BOUTIQUE (su versión moderna del glamour del viejo Hollywood) y como toque final, el mini capazo a modo de cubo deshilachado de la firma SENSI STUDIO, hecho a mano con paja toquilla 100%.
Como nos adelanta María Lautenschlaeger en ELLE, “veo, veo… una temporada cargada de sofisticación.” ¡Vamos a por ella!
Americana: Nueva colección “Into the night” de Zara aquí creada en colaboración con Kate Moss. Vestido Zoe: Fara aquí. Sandalias: Jimmy Choo PV 2022. Capazo Mini Frayed bucket: Sensi Studio aquí. Collar: Sita Nevado. Info: 934 67 59 16. Gafas: Saint Laurent.
Fotografía: Gorka González.
1 Comment
Gemeladas
3 septiembre 2022 at 18:40Para adelante con ilusión, seguro que lo que viene te depara muy buenas sensaciones.
Estás ideal con el look, no me puede gustar más el vestido con la blazer, y ese bolsito es una cucada.
Besos.
Gemeladas